El amor es lo que tiene

Hooolaaaaaa golfos.Aquí está vuestra salvadora del aburrimiento y causante de vuestras tremperas matutinas, vuestra amiga Lucy La Guarra. Bienvenidos, caballeros (y obstáculos para esos caballeros) al consultorio sentimental que resolverá todos vuestros problemas, o al menos os hará un buen apaño. Muchos me preguntan: "Lucy, ¿no crees que tu postura de buscar a un hombre con un cochazo, pasta, y un futuro prometedor es muy poco romántica?", "Lucy, es una postura demasiado cínica, el amor también existe; seguro que algún día encuentras a tu media naranja"-como no sea una media naranja con cochazo y pasta, vais listos, guapos-, "Señorita La Guarra, deme una oportunidad, le aseguro que nadie le amará como yo lo hago"-ja,ja, y ja, chavalines. Os podéis dar con un canto en los dientes por haber pasado un rato conmigo. Qué le voy a hacer, en el fondo soy un alma caritativa y me gusta ayudar a la gente. ¿Tan difícil es de entender la expresión "un rollito pasajero"? Nenes, si os concedo el honor de estar una sola noche conmigo, tened claro que va a ser la primera y única vez que vais a estar con una mujer de verdad. Si yo soy un menú completo, el resto de mujeres con las que estéis (si es que lográis encontrar a alguna que sea al menos la mitad que yo,lo cual dudo)llegarán como mucho al café con sacarina del desayuno.

Ay, ilusos...romanticismo...tenéis una idea muy equivocada de una servidora. Soy de lo más sentimental y amoroso que existe. Lo que ocurre es que os habéis creído esas tonterías de princesitas. ¿En serio creéis que el Príncipe despertó a la Bella Durmiente con un beso?clarooo, con un beso...la cuestión es dónde fue ese beso. Y seguro que hizo falta algo más que unos tiernos labios,¿o pensáis que se puede despertar a alguien tras dormir cien años con un simple "muak"?Eso sin hablar del calentón que llevaba el principito, por no mencionar el de la Loba Durmiente, que un siglo de abstinencia no es fácil de soportar ni durmiendo. Cuánto os queda por aprender.

Me cuesta creer que aún estéis con esas bobadas. Intentad seguir mi razonamiento, por difícil que sea concentraros y apartar la vista de mi escote. Entre alguien, no ya pobre, digamos mediocre, como sois todos los hombres, de apariencia normal, con un piso de 30 metros cuadrados, una vida sencilla...o un triunfador, con un ático, forrado de billetes, un gran trabajo, y un tren de vida muy alto, ¿a quién escogeríais?"Al mediocre pero de buen corazón", decís. Buergh, dais asco y estáis engañándoos, digo yo.

Sentaos y aprended la verdad de la vida: si un tío tiene dinero, buen coche, buen piso, buen trabajo...automáticamente es un hombre muy guapo, atractivo, con gran vida interior y buenos sentimientos. Triste, pero cierto. Las mujeres basamos nuestra perspectiva del sexo opuesto según sea su posición y estatus social. Incluso en caso de dos tipos en igualdad de condiciones(ni muy tontos ni muy listos, ni muy guapos ni muy feos...)ganará el que más dinero y prestigio tenga. Cuanto antes lo admitáis, mejor os irá, muchachuelas, Y cuanto antes lo admitáis, jovenzuelos, antes lo asumiréis y os ahorraréis decepciones.

Y quién sabe...puede que tengáis la suerte de que nos encontremos y si me siento de humor, alegraré unos minutos vuestras sosas vidas. Soy así, generosa hasta las cachas.

Nos vemos en la próxima entrega, en la que hablaremos de tamaños -y os adelanto que sí, el tamaño SÍ, repito, SÍ importa- para resolver las dudas que os surjan.

Un lametón, guapos